El pasado 26 de diciembre arrastré a mi compañero a lo que, al principio, parecía un pueblecito que poco tenía que mostrarnos de época romana, pero nos llevamos una grata sorpresa:
Lliria es un municipio perteneciente a Valencia, a 25 kilómetros de la capital. La ciudad íbera Edeta estaba situada en un montículo alargado llamado Tosal de San Miguel. Por su posición estratégica en ese montículo, desempeñó un papel importante en las guerras civiles romanas. En el 76 a.C. fue destruida por las tropas sertorianas* por permanecer fiel al bando republicano; sus habitantes tuvieron que trasladarse a un llano y crearon una Edeta totalmente romana (donde actualmente encontramos Lliria). Esta ciudad alcanzó su máximo apogeo en el siglo I d.C gracias a uno de sus ilustres ciudadanos: «el senador consular Marcus Cornelius Nigrinus Curiatus Maternus«, miembro de la aristocracia senatorial y candidato a emperador llegando a ser el rival de Trajano por el trono imperial.
«Según el historiador Plinio (Edeta) era un municipium de derecho latino del Coventus Tarraconensis en la Provincia Hispania Citerior«.
A continuación os daré un paseo por los varios vestigios que encontramos bajo la actual Lliria:
En primer lugar llegamos a los Mausoleos romanos de la calle San Vicente. Ahora nos encontramos con los restos de estos mausoleos en pleno centro de Lliria, pero como establecía la ley de las XII tablas los monumentos funerarios debían estar ubicados siempre fuera de la ciudad, junto a las principales vías de entrada, donde se situaba la necrópolis*. Fueron construídos alrededor del siglo I: el segundo edicifio en su interior conserva una losa (conditorium) con un orificio central para las libaciones, bajo la cual se halló: algunos restos de la incineración en una urna de vidrio, su tapadera, un anillo de oro con una esmeralda grabada con un Eros de los siglos I-II d.C y un sestercio del emperador Tito del 79-81 d.C. El anillo se encuentra en el Museo de Prehistoria de Valencia.
Este yacimiento soprende por su estado de conservación; se pueden observar las marcas que las vallas, o rejas, que dejaron al proteger el mausoleo. También una inscripción en tabula ansata en la entrada del recinto funerario.
P. CLODIVS
EVTYCHVS
SIBI. ET. CLODIAE
NATALI. VXORI
CARISSIMAE
«Publius Clodius Euticus [te erigió] para él y para Clodiae Natali, su amada esposa».
Horario de los Mausoleos romanos:
Abierto de martes a domingo de 10 a 12.
Cerrado lunes y último domingo de mes.
Después de la visita a los mausuleos nos dirigimos al casco histórico de Lliria, sobre los restos del antiguo castillo, donde se encuentra el Museo Arqueológico (MALL). A destacar la gran cantidad de inscripciones que el museo alberga y la falta del impresionante mosaico de los «Doce trabajos de Hércules» que se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid (MAN).
Horario del Arqueológico de Lliria:
Abierto de martes a domingo de 11 a 14.
Cerrado lunes y último domingo de mes.
Y por último, cuando ya nos íbamos a casa, decidimos ir a visitar el Santuario y las Termas de Mura. No lo añadimos a la ruta porque estaba cerrado por obras y creímos que no ibamos a poder ver nada. Aún así, estábamos cerca y decidimos acercarnos.
La sorpresa fue esta: 3600 m² de complejo delante de nosotros. Pedí, amistosamente, o ya sabría lo que le esperaría después, una panorámica del lugar (con cierto peligro). Pero:
Este enorme complejo estaba, y está, compuesto por un templo romano donde se consultaba el oráculo, y unas termas para hombres y mujeres. Se empezó a excavar en los 70, y todavía hoy se sigue recuperando paulatinamente. Se sabe que se construyó en el siglo I d.C. promovido por el nombrado anteriormente Marcus Cornelius Nigrinus.
En el templo había una sibila que adivinaba y auguraba respondiendo a las preguntas que sus ciudadanos le planteaban. Y junto a este se encuentran las termas, baños dobles para hombres y mujeres. Según parece, hay unos caminos habilitados por todo el conjunto arqueológico que permiten dar un paseo por el pasado en ese espacio con tanta carga religiosa, medicinal y lúdica. Pero nos tendremos que esperar a que finalicen sus obras. A mi parecer es uno de los mejores vestigios romanos que he visto.
Y allí observé pruebas para refutar mi teoría: Los dioses olímpicos siguen con nosotros pero «algo» cambiados:
Un divino y peculiar vigilante de restos romanos.
Todas las fotos en Flickr (próximamente)
*Sertorio: Quinto Sertorio (Quintus Sertorius) fue un destacado político y militar romano de la época final de la República. Fue destinado a Hispania (España) cuando fue nombrado tribuno militar en el 97 a.C. sirviendo a las órdenes de Tito Didio.
*Necrópolis: (νεκρόπολις) literal: «ciudad de los muertos». Cementerio de gran extensión donde abundan monumentos fúnebres.